martes, 27 de abril de 2010

Palpitando la llegada de Megadeth a la Argentina V

MONSTERS OF ROCK 95: RECUERDOS DEL FUTURO

Una de las más frecuentes irregularidades psíquicas es la aparición de un sueño particular e inquietante que se repite una y otra vez con creciente intensidad para el afectado. Siendo yo mismo el paciente en este caso, y dada la naturaleza de la perturbación, se comprenderá que no esté ansioso de ingresar a ninguna clínica mental para hacerme ver de la cabeza. El asunto es que la fortuna me ha permitido asistir a varios shows de Megadeth desde el '88 para acá, y cada vez que los tengo enfrente pienso que estoy soñando lo mismo de la ocasión anterior con algunos detalles cambiados, pero me gustan más, más y más. Normalmente me despierto con un terrible dolor de cuello (como si hubiese estado agitando la cabeza durante una hora entera) y una satisfacción de sonrisa interminable.



El sábado del Monsters, después del concierto de Therapy?, sufrí otra de esas formidables alucinaciones. Sólo que en esta oportunidad me encontraba sobre el mismo escenario y, por obra y gracia de la misma ilusión onírica, estaba en posición de contemplar en detalle a la multitud que encaraban Mustaine, Friedman, Menza y Ellefson. Por lo demás, el sueño se desarrolló con características familiares. Fue arrancar con "Skin O' My Teeth" y emprender una cabalgata sin pausas a lomos del puro asombro. Tema a tema, el mar de cabezas rugía como un animal informe que burbujeaba sobre la superficie del estadio como si lo hubiesen extendido con un cuchillo de untar y se debatía en olas perfectas como si desde el escenario dos manos inmensas sacudiesen una verdadera alfombra humana. Las cuatro figuras agitaban las melenas y parecían realimentarse todo el tiempo de la energía huracanada que se generaba a sus pies. Y el rito prosiguió en forma ininterrumpida hasta el final, excepto en aquellas escasas ocasiones en que Dave Mustaine se detuvo para regodearse con el espectáculo permitiéndole a la propia vanidad pastar a sus anchas. Claro que el corazón de la masa estalló en el punto preciso sin concederse demoras. El primer riff de "Symphony Of Destruction" fue monstruosamente engrosado por ese canto monumental que surgió apenas la última vez y tiene depositario exclusivo: "¡Megadeth! ¡Megadeth! ¡Aguante Megadeth!". Detalles y variantes que se van agregando en cada sueño, como lo de romper la guitarra al final del concierto. Dígame la verdad, doctor, ¿qué tan mal estoy?.

CRÓNICA DEL RECITAL DE MEGADETH EN EL MONSTERS OF ROCK 1995 - REVISTA MADHOUSE N° 58 (OCTUBRE DE 1995)


Palpitando la llegada de Megadeth a la Argentina IV

MÍRENLOS CONVERTIRSE EN DIOSES


Se apagaron las luces y la gente ya estaba regalada. Una suave melodía del lejano oeste fue suficiente para que se nos erice la piel. El primero que saluda es Nick Menza, montado sobre una estructura de ciencia ficción con forma de batería, monstruo de tambores y platillos, que empiezan a atronar y le dan pie al resto de la banda: Dave Mustaine, Dave Ellefson y Marty Friedman, que entran rumiando, masticándonos la piel con "Skin O' My Teeth". Los fans de la banda no tienen lugar en sus mentes para malos pensamientos, pero algunos escépticos cometimos la osadía de imaginar que tantos años de recuperación indefinida habían puesto a Megadeth al borde del primer escalón de la terrible escalera de la decadencia, por la que varios se deslizan en picada, pero que Megadeth mira de lejos. Ellefson aseguró que "el día que no podamos más será nuestro último día, no vamos a andar dando lástima por ahí". Sentí felicidad al comprobar que ese día, al menos en el aspecto musical, queda a varios años de aquí.


Una vez más Mustaine se levantó entre los muertos, demostrando que a pesar de tocar y y cantar "Wake Up Dead", el cuero le dio como para transformarse en un Dios para 25.000 argentinos durante cinco noches consecutivas. Cuando los tipos se suben al escenario, las historias, los rumores y el pasado quedan enterrados bajo toneladas de notas, acordes, solos y canciones que despejan todas las dudas, al menos a lo largo de hora y veinte, hora y media. Cuando Megadeth termina de aplastar a la gente convertido en la locomotora de su último video, "Train Of Consecuences", pasan a ser nada más que seres humanos, más talentosos que otros, que harán de su vida lo que les venga la gana, más allá de que nosotros exijamos explicaciones de vez en cuando. Mustaine lo dejó claro al final del coro: "This Was My Life". El significado detrás de la canción puede ser infinito, pero las palabras son tajantes: es SU vida.


Mustaine es protagonista. Siempre. Él manda y todos lo tenemos asumido: Ellefson, Menza, Friedman y nosotros. Él comienza a girar sobre el escenario, ensayando un riff que acelera, que acelera, y metido en esa celda imaginaria anuncia: "Hello Me". Enseguida lo imaginario pasan a ser las balas que suda la banda, se incrustan en el cuerpo de la gente que devuelve el saludo con un estremecedor "¡Sweating Bullets!", a cinco mil voces. No sé si tiene que ver con parquedad o con la actitud al encarar un show de determinada manera, según se van sucediendo los acontecimientos. Nosotros nos aburrimos cuando nos hablan mucho, nos quejamos cuando nos hablan poco, pero nos encanta que nos hagan desear, y cuando Mustaine por fin se dignó a decir "Hola chicos, bienvenidos a la casa de Megadeth" en un castellano muy digno, pronunciado con ese timbre de voz tan característico del cantante, todos nos hicimos pis encima. El "¡Olé, olé, olé, olé, Mustaine, Mustaine!" o "¡Megadeth, Megadeth!" no se hicieron esperar. La contrarrespuesta fue: "¿Qué están diciendo?", a medio camino entre la simpatía y el qué mierda dirán. Nunca antes me puse a pensar seriamente en el asunto, pero las ganas que tenía de que Mustaine nos hable me demostraron que la barrera del idioma es un obstáculo infranqueable que nos distancia de los grupos. Sí, la música es un medio de comunicación, habla por sí misma, aunque, ¿no sería estupendo que tipos como Mike Muir, Henry Rollins o Dave Mustaine compartan TODO lo que tienen para decir con nosotros?¿Cuántos sabemos siquiera qué dicen los músicos en sus letras? El rock es un lenguaje universal que todos interpretamos, y es asombroso saber que en Rusia, Turquía, Japón o Argentina disfrutamos a Megadeth de la misma manera, pero a veces me da la sensación de que no es suficiente, de que al no poder entablar un diálogo fluído nos quedamos afuera en muchas.


Ellefson me comentó, refiriéndose a la sinceridad de los músicos, que ellos demuestran con hechos, no con palabras. Menza asegura que para él, el mejor álbum de Megadeth es "Youthanasia". Estoy convencido de que muy pocos de los 25.000 que llenaron los cinco Obras comparten su opinión. Y a diferencia de Metallica, que llevó 30.000 personas a Vélez montadas sobre "Metallica", Megadeth convocó únicamente con su historia, con sus clásicos. Dudo que uno solo de los que fueron a ver a Megadeth haya conocido al grupo a través de "Youthanasia". Sí estábamos al tanto de "Train Of Consecuences". También disfrutamos con "Reckoning Day". Pero yo cambio un "A Tout Le Monde" y un "Victory" por más de "Peace Sells..." o "Rust In Peace" sin detenerme a evaluarlo demasiado, incluso transo por un "99 Ways To Die". Entiendo que los temas nuevos quedaron en evidencia ante veteranos como "In My Darkest Hour" o "Peace Sells...But Who's Buying". Ahora bien, si les pasamos por arriba con la aplanadora de "Rust In Peace": "Hangar 18", "Tornado Of Souls" y "Holy Wars", de "Youthanasia" no quedan ni las cenizas, ni la vieja, ni los bebitos ni nada. Sólo quedaba "Anarchy In The U.K." para la despedida final.

Sospecho que Dave Mustaine es uno de esos genios que sacan lo mejor de sí mismos bajo presión. Los estados de ánimo son el termómetro con el que se miden las expresiones artísticas. Si es así, yo prefiero al Mustaine irascible, agresivo, atormentado, genial. No descubrimos algo nuevo si recordamos que desde siempre las drogas han estado asociadas con la creatividad. Pero no me malinterpreten, lo que intento recalcar es...los chicos de Biohazard lo expusieron mejor: descargar la mierda negativa de forma positiva. A Dave Mustaine yo lo quiero enojado, no drogado. Es SU vida, pero en cierta forma todos los que vivimos SU música somos parte de ella.

CRÓNICA DE LA REVISTA MADHOUSE N° 48 DE LOS SHOWS QUE MEGADETH DIO EN EL ESTADIO OBRAS SANITARIAS DEL 1° AL 5 DE DICIEMBRE DE 1994


lunes, 26 de abril de 2010

Palpitando la llegada de Megadeth a la Argentina III

Ocurrió literalmente durante el fin de semana. Y hasta a mi me cuesta creermelo. Estaba claro que iba a haber un cambio en la formación porque James Lomenzo se marchaba. Dave y yo habamos por teléfono y las querellas y todas las historias que hemos tenido durante estos años simplemente se esfumaron. Esto viene a demostrar lo que se puede lograr con el contacto directo! Obviamente, yo no tengo ni idea de qué pasaba dentro del grupo. Pero recibí un mensaje de Shawn que simplemente decía 'Si hay un momento para que Dave y tú hablen, es ahora'. Es uno de esos mensajes a los que respondes de inmediato. Lo típico en MEGADETH, donde todo sucede rápido. Siendo de lo más sincero, hablar con Dave de nuevo fue genial. Fue algo que ocurrió en el momento adecuado.

DAVE ELLEFSON Y SU REGRESO A MEGADETH (FEBRERO DE 2010)


domingo, 25 de abril de 2010

Palpitando la llegada de Megadeth a la Argentina II

Pude apartarme del crack y la heroína pero aún, hay momentos en que no logro desprenderme por completo de la necesidad de evadirme un poco. Sin embargo, ya no alimento más a ese caparazón de egoísta y drogadicto que he llevado en mis espaldas durante muchos años. Podría decir que realmente he emergido a la luz como un "buen chico". Y, aunque nadie lo crea, creciendo entre la urbanización monstruosa Los Angeles y el "civilizado paraíso" que es San Diego, no tengo ningún derecho a afirmar que "mis padres han tenido la culpa de todo lo que me ha pasado en la vida" (cliché utilizado por la mayoría de la gente que no tiene huevos para encontrarse a sí mismo). Si hay algún culpable, ese soy yo. Me escapé de gran parte de mis problemas poniéndome ciego. Finalmente me di cuenta que no me había ido tan mal y que podría ser muchísimo mejor si dejaba de una vez por todas a la droga.

Tenía un ego rabioso y absolutamente nada de amor propio. Así que exterioricé mi ego interno para convertirlo en confianza. Y me dediqué a nutrir mi vida personal con cosas que me hacían realmente felices, como aprender kickboxing, practicar caída libre, casarme y tener un hijo. Para nada puede compararse con lo que sentí cuando nació Justis. Ahí estaba este tipo desgraciado, hecho polvo, teniendo en sus brazos a un ser que no merecía tener un padre como yo. ¡Pensar que un montón de mierda pudo convertirse en un ser humano...!

DAVE MUSTAINE



Palpitando la llegada de Megadeth a la Argentina I

En el mundo solamente existen dos emociones: el amor y el miedo. Dentro del miedo entran todos los sentimientos negativos. Celos, lujuria, envidia, egoísmo, orgullo. Miedo por perder algo, miedo por no poder conseguir algo que realmente se desea. Miedo a lo desconocido, al desafío, a ser decubierto, a no gustar. Y nada de eso tiene que ver con el amor. La gente comenta que me estoy volviendo bastante "blando" en cuanto a sentimientos y que eso lo transmito a mi música. No es cierto. Todavía puedo hacer funcionar mi cabeza, saltar de los aviones, jugar con mi hijo. Si alguien quiere desafiarme físicamente, trataré de disuadirlo. Si alguien me quiere desafiar mentalmente, ambos nos sacaremos las telarañas de la mente. Y estoy también dispuesto a enfrentar un desafío espiritual porque me puedo subyugar a mi mismo para ser desafiado espiritualmente.

DAVE MUSTAINE


lunes, 19 de abril de 2010

Hoy, 19 de abril, se cumplen 19 abriles sin Bulacio

Hoy se cumplen 19 años de la detención de Walter Bulacio, asesinado brutalmente por la policía a la salida de un recital de Patricio Rey y sus Redonditos de Ricota en Obras Sanitarias.

Se cumplen también 19 años de injusticia, pero también de memoria colectiva, según qué mitad del vaso querramos mirar.

De un lado o del otro, Walter se convirtió en una bandera ineludible para aquellos que están en el rock, sean del palo que sean. Y pese a la bronca porque todavía estamos lejos de decir que se hizo justicia, este caso en particular fue un punto de inflexión en la tirante relación entre el rock y la brutalidad policial.

Hasta hace 19 abriles, quizá un poco menos, el rock era sinónimo de todo tipo de demonización por parte de los sectores más reaccionarios y conservadores de la sociedad. Ni hablar de los medios. De hecho, recuerdo que poco tiempo después de este caso, a la salida de un recital de los Ramones en ese mismo recinto, los punks produjeron una serie de destrozos, posiblemente mayores a lo que sucedió la noche que Walter era torturado en un calabozo. ¿Venganza? ¿Solidaridad con un semejante, amén de las diferencias que había entre la tribu punk y "ricotera"? Posiblemente así fuera. Lo que está claro es que a medida que fueron pasando los años, y las voces fueron proliferando a favor de Bulacio, se fue modelando un rechazo hacia la arbitrariedad policial, que las generaciones venideras fueron adoptando como lema.

Es cierto, como decía un viejo clásico de Hermética, "la culpa ajena es barata, regalarla no nos cuesta". Y siempre hay un sector del público rockero que patea el avispero para que los palos no tarden en llegar. Seguramente el caso más cercano y conocido es lo que sucedió con el recital de Viejas Locas en Vélez, y muchos casos que no han trascendido, o no han tenido la repercusión mediática que tienen los eventos masivos, pero que por suerte la CORREPI (Coordinadora contra la Represión Policial e Institucional) se encarga de llevar a la Justicia, amén de los resultados.

De todos modos, la cuestión es mucho más profunda que si siguen habiendo o no abusos policiales. Es más, estoy seguro que sigue siendo así, de acuerdo a las cientos de denuncias acercadas a la justicia por parte de la CORREPI y familiares de víctimas de la represión policial. Pero a la hora de la "condena social", la opinión pública (o la opinión que dicen representar los medios) por lo general tiende a suponer que la institución policial hizo uso y abuso de su autoridad, y el demonio cae del otro lado. Es cierto, el comisario Miguel Ángel Espósito sigue sin condena penal, y hasta tanto no esté tras las rejas, la justicia no será completa. Pero permítanme creer (y aferrarme a la ilusión) que a pesar de no tener aún el vaso lleno, estamos ante una pequeña batalla ganada contra la represión.

De nosotros depende que no haya otro Bulacio más. Y de nosotros dependerá también que la Justicia no olvide ni omita que los culpables deben estar en la cárcel.

MEMORIA. SIEMPRE.

domingo, 18 de abril de 2010

Todos Tus Muertos arrasaron en Groove

Todos Tus Muertos se presentó el pasado sábado 17 de abril en Groove, en el marco de la "Fiesta Clandestina". Una buena cantidad de público y un sonido impecable dieron pie para que la banda ahora comandada por Pablo Molina diera un show potente, muy caliente, y que dejó a los asistentes con ganas de escuchar más.

Pasadas las 2 am apareció la banda sobre el escenario, que arrancó con "Pulso", primer corte del último álbum. Luego siguieron "Los envidiosos", "Punky Reggae Party" y "Tu alma mía". Gamexane, histórico violero de la banda, dedicó un momento del show para interpretar el "Feliz cumpleaños" a Pablito, que fue coreado por todos los asistentes.

Durante una hora y media intercalaron temas de "Crisis Mundial" con viejos clásicos. Los momentos más interesantes llegaron de la mano de éstos últimos, como "Tu alma mía", "Gente que no", "Mate", "Andate", "Se que no" y "Trece". Entre las nuevas canciones, se destacaron "Medios de confusión", "Eres mi vida", "Sea lo que sea" y "Crisis Mundial", vieja composición de la época de Los Laxantes.

Pese a carecer del despliegue escénico de otras épocas (el marco tampoco lo ameritaba), los Muertos sonaron muy ajustados, casi sin fisuras, y lograron progresivamente calentar el ambiente y meterse el público en el bolsillo. El más carismático de todos sigue siendo Gamexane, que con sus "extrañas" reflexiones arrancó algunas carcajadas, mientras que Pablo Molina y Félix Gutiérrez matienen su habitual perfil bajo.

Las últimas notas de "No te la vas a acabar" fueron paradójicamente el final de un recital que confirma que TTM todavía está de pié, y sigue siendo en vivo una propuesta más que interesante.



viernes, 16 de abril de 2010

Adelanto del nuevo álbum de Ozzy Osbourne

Las modas pasan, algunas bandas también, pero el viejo Ozzy continúa en el ruedo y siempre es noticia. La buena nueva es que Mr. Osbourne lanzará el próximo 14 de junio un nuevo disco (el vigésimo de su carrera solista), bajo el título de "Scream".

Pese al hermetismo, a dos meses de su salida a la venta se dio a conocer vía página web (http://www.metalinsider.net/new-music/stream-ozzy-osbourne-let-me-hear-you-scream) un adelanto de lo que será el flamante álbum, que contará nuevamente con la producción de Kevin Churco (produjo en el 2007 su última placa "Black Rain") y con la presencia de Gus G. en la viola, en lugar de Zakk Wylde.

El tema en cuestión se llama "Let me hear you scream" y fue utilizado para ser incluido en una de las escenas de la serie norteamericana "CSI:New York".

Para que vayas palpitando lo que se viene, te dejamos un video para ir despuntando el vicio.

Todos Tus Muertos - "Crisis Mundial"


Todos Tus Muertos vuelve a la carga luego de 12 años sin grabar un disco de estudio (el último había sido "El camino real" en 1998) y a 4 años de haber editado "Re-Unión", un registro en vivo con la nueva formación de la banda. Hoy Pablito Molina es el único cantante, y es un dato fundamental para tener en cuenta el nuevo sonido de TTM.

Lejos de los años en los que prevalecían la fuerza del punk y del hardcore en estado más puro, y con una clara intención de no encasillarse dentro de un estilo marcado y definido, hoy los Muertos se debaten en una mixtura de reggae, ska y "ritmos latinos", con resultados desparejos. Por un lado, porque en los pocos momentos de fuerza, se nota que a Pablito le cuesta moverse en ese terreno, y es ahí donde se extraña el sello inconfundible de Fidel Nadal. La ausencia del ex-lider de TTM es notoria en los arranques "punkies", como "Herido de Muerte", "Crisis Mundial" y "Medios de confusión".

Los puntos altos son, en cambio, los momentos de reggae como "Eres mi vida" y "El ritual de la muerte" , en los que Pablo Molina se nota muchísimo más cómodo y parece manejar de taquito. Esto al mismo tiempo podría leerse como una falencia y una limitación de la nueva formación, que no logra suplantar con la sola presencia de un cantante la ausencia del viejo frontman. Además, las letras por momentos rozan ciertos lugares comunes y clichés largamente repetidos por cientos de bandas del estilo. Ahí quizá esté también otro punto débil, que pone en evidencia la importancia que tenía Fidel. Que se entienda, el mensaje de la banda sigue siendo el mismo, quizá menos panfletario y más descriptivo, pero las letras en algunos casos están al nivel de una banda novata, con rimas y metéforas pocos felices.

Los mejores momentos vienen de la mano de "Punky reggae party", un cover del clásico compuesto por Bob Marley y Lee Perry, sin dudas el más ganchero de todo el álbum, y "Crisis mundial", un viejo tema de Los Laxantes, banda pionera del punk nacional que integraron Horacio "Gamexane" Villafañe y Félix Gutiérrez en los 80s, actuales guitarrista y bajista de TTM respectivamente.

En definitiva, para los viejos seguidores de la banda difícilmente encuentren en este disco una vuelta a las raíces, ni una evolución en el camino que venían siguiendo hasta "El camino real". Para las nuevas generaciones de fans, están ante la posibilidad de ver una banda de culto nuevamente sobre las tablas, y con una propuesta renovada en algún sentido. Habrá que ver hasta que punto TTM podrá sostenerse sin la estampa (demasiada evidente) de Fidel.

De todos modos, qué mejor que escucharlo y sacar tus propias conclusiones.

FICHA TÉCNICA:

Temas:
  1. Pulso
  2. Fuego Amigo (Sobre Bagdad)
  3. Sea lo que sea
  4. Herido de muerte
  5. Eres mi vida
  6. Punky Reggae Party
  7. El ritual de la muerte
  8. Medios de confusion
  9. Embrujados
  10. Crisis Mundial
  11. Nuestros Hijos Son
  12. El reventon
El álbum fue producido por los TTM y Martín "La Mosca " Lorenzo, que colaboró como percusionista invitado desde el '95. Fue grabado en los estudios Panda y Lavardén, y masterizado por Álvaro Villagra en Estudios del Abasto.


Link: http://freakshare.net/files/ismqsunf/Todos_Tus_Muertos_-_Crisis_Mundial__2010_.rar.html


Video del primer corte de Crisis Mundial: "Pulso"


jueves, 15 de abril de 2010

Falleció Pete Steele, líder de Type O Negative


Josh Silver, tecladista de Type O Negative, confirmó la muerte del frontman de la banda el día de ayer, miércoles 14 de abril, a la edad de 48 años. Aún no se dio a conocer oficialmente la causa de la muerte, pero se cree que Steele murió por razones cardíacas.

La noticia fue dada a conocer por el sitio Blabbermouth.com, el cual depende de Roadrunner Records, el sello discográfico que representa a la banda. El guitarrista de la banda, Kenny Hickey, confirmó que los rumores son ciertos.

En 2005, mucha gente se sorprendió al ingresar al sitio web de Type O Negative y ver una lápida que decía "Peter Steele - 1962 - 2005 .... Free At Last" ("libre al fin"). De acuerdo a Epinions.com, hubo rumores sobre una enfermedad (desde cáncer a sida), sobre una muerte natural, sobre un intento de suicidio... y la lista sigue. Al contrario, Steele estaba vivo y la lápida fue una broma, obviamente de mal gusto para muchos.

Steele nació en 4 de enero de 1962 bajo el nombre de Petrus T. Rataczyk en Brooklyn, New York. Medía dos metros y un centímetro y tenía una voz grave en demasía, la cual fue uno de los íconos más reconocidos en la música de Type O Negative.

Antes de formar Type O Negative, Steele tocó en Fallout y en Carnivore (thrash)

Que en paz descanses, Pete.


miércoles, 14 de abril de 2010

El Sistema


Uno de los aspectos que siempre me resultaron incómodos dentro de la cultura del rock son los clichés. No me refiero sólo a los lemas o las frases hechas, sino también a los pensamientos hechos. Esos conceptos trillados que la gente repite todo el tiempo como si fuesen verdades inconmovibles sin detenerse a pensar en su razón o considerar sus alcances (...) Tomemos como ejemplo aislado la palabra sistema y la particular carga de sentido que se ha tejido a lo largo del tiempo en torno a ella.

El término constituye ni más ni menos que un resabio del pensamiento anarquista de fines del siglo XIX y principios del siglo XX. Si bien ya estaba presente en el lenguaje de la sociedad cuando el rock despuntaba, incorporándose cada vez más a menudo a la jerga, recién se impuso definitivamente con el movimiento punk (...) El diccionario nos dice escuetamente que un sistema es un conjunto ordenado de entes que contribuyen a un fin; vale decir, la noción de un determinado orden. Un sistema puede ser político, económico, legal, social, cultural...O, en todo caso, éstos pueden resultar aspectos de un único sistema o forma en que la sociedad se manifiesta (o se rige) en su totalidad. En este sentido se maneja el término con más frecuencia.

Lo más negativo del uso de la bendita palabra es que quienes la emplean automáticamente se ponen afuera, como si no perteneciesen al mencionado sistema. Y el caso es que todos vivimos dentro de un sistema, lo alimentamos y lo reinventamos todo el tiempo, nos guste o no. Nadie se escapa, ni siquiera los que pretenden evadirlo. Acciones elementales como trabajar, consumir, hacer cola y hasta pedir limosna te colocan inmediatamente en el orden económico de la sociedad. De hecho, no necesitás hacer nada para formar parte del sistema porque, así llores o patalees, vivís en un marco político, jurídico e institucional que seguramente no elegiste pero pesa en cada uno de tus actos.

La tendencia de hoy en día es endilgarle todo lo malo, lo sucio y lo feo al malhadado sistema. De algún modo le estamos echando la culpa a "otro", un algo del todo ajeno a nosotros, a lo cual no pertenecemos ni nos concierne. Representa inconcientemente una idea al mismo tiempo cómoda y paralizante: da a entender que el tal sistema es un monstruo demasiado grande para ser vencido y por lo tanto todo el esfuerzo es romántico e inútil. Si un juez deja libre a un asesino es por el "puto sistema", si el gobierno abusa de los impuestos se debe al "puto sistema", si los trabajadores van a la huelga, la causa es del "puto sistema"; pero si un día suena un tiro para el lado de la justicia, a nadie se le ocurre afirmar que el "puto sistema" tuvo algo que ver. Quizá esto ocurre porque tenemos en mente la idea de que los sistemas funcionan solos y sin necesidad de vigilancia, como maquinarias perfectas, robóticas, donde los hombres apenas representan el papel de engranajes fijos y siempre obedientes (...) campea el olvido de que los sistemas humanos son rotundamente imperfectos debido a que están encarnados por individuos, siempre minúsculos y asediados por el miedo, la corrupción y el error.

Esto no quiere decir que no haya sistemas mejores que otros, y suelen ser aquellos donde la libertad y el respeto figuran a la cabeza de las prioridades. ¿Qué hacer, entonces? ¿Aspirar a producir sistemas cada vez más justos e invulnerables transformándolos desde adentro? ¿Oponerse rabiosamente a todo intento de ordenar la sociedad que nos rodea? Ser o no ser, ¿esa es la cuestión? (...) La pregunta es vieja y profunda como aquella herida que se hace sentir en los días húmedos y yo, naturalmente, no tengo la respuesta. Aunque, entrando en el terreno de la opinión personal, me parece ridículo querer destruir todo hasta los cimientos para edificar de nuevo, porque aquello que se construya resultará igual de endeble que lo anterior y el costo puede superar -dramáticamente- nuestras expectativas.

En una de esas llegó la hora de sepultar con la debida pompa ciertas ideologías que ya apestan y desempolvar otra vez los ideales, que siempre son más sanos, más humanos, más urgentes. Antes que preocuparme por saber si estoy dentro o fuera de lo que algunos llaman sistema, prefiero estar a favor de lo que es justo, de lo que es libre y de lo que es bueno.

Editorial. Revista Madhouse. Buenos Aires, Diciembre de 1995